Este libro es el relato de un aprendizaje erótico, explícito y desafiante, y también una perturbadora historia de amor que, con una desvergonzada conciencia del deseo, no duda en traspasar la
línea de algunos tabúes o pasiones oscuras. Sumida todavía en los temores de una infancia carente de afecto, Lulú, una niña de quince años, es seducida por Pablo, el amigo de su hermano mayor
por el que desde pequeña sentía una secreta fascinación. Después de esta primera experiencia, Lulú, niña eterna, acaba por aceptar el desafío de prolongar indefinidamente, en su peculiar
relación sexual, el juego amoroso de la iniciación y el sometimiento, en un universo privado donde el tiempo pierde valor. Pero el sortilegio arriesgado de vivir en un mundo fuera de la
realidad se rompe bruscamente un día, cuando Lulú, ya con treinta años, se precipita, indefensa pero febrilmente, en el infierno de los deseos peligrosos.