Una metáfora de nuestro tiempo, de la corrupción política y la desesperanza social, y de cómo un espíritu luchador puede ponerlos en jaque esgrimiendo honestidad y justicia, dos valores casi
olvidados. Para Valli Querol, hija de unos humildes masoveros de Morella, la Guerra Civil se prolongó en una batalla clandestina y en un largo exilio. Pero Valli nunca perdió la esperanza de
recuperar aquella sociedad igualitaria con la que soñaba. Tras la llegada de la democracia, regresó a Morella y volvió a ejercer de maestra. Décadas más tarde, en medio de la burbuja
inmobiliaria, el alcalde de Morella planea la venta de la antigua escuela para convertirla en un casino, en pisos o en un centro satélite de un colegio elitista. Con lo que no contará es con
la oposición y el tesón de la octogenaria maestra republicana, que hará todo lo posible por evitar que su escuela se convierta en moneda de cambio entre políticos corruptos.