Es este mi libro más personal, intimista y directo. Se publica con autorización de nadie, para uso y disfrute (con efectos secundarios) de aquellos que esperan adentrarse en este parque
temático del yo:pasen, pasen, acudan a la zona de las conciencias perdidas, al tobogán nihilista, al desdoblamiento en mujer barbuda, a las tazas locas que se aman o a la tómbola de la
corrupción.Dejen para el final las palomitas con sabor a sueños y la noria de las esperanzas que no llegan.Pasen, pasen. Verán: yo no soy el mismo que entró...